Desde su relación con los fans, hasta las lágrimas de frustración tuvo que soportar el mexicano para poder levantar el Scudetto.
Hirving Lozano inmortalizó su nombre en los récords de la Serie A tras proclamarse campeón de liga con el Napoli y ser el primer futbolista azteca en conseguir esta hazaña en el 2023; pero no todo fue sencillo para el extremo pues desde su llegada el club en 2019 ha tenido que acoplarse a 3 técnicos, ganarse su lugar en el equipo y empatizar con los fanáticos Napolitanos.
Chuky compartió su aventura en Italia durante una entrevista para TDN, el extremo derecho no tuvo problema en reconocer las adversidades que vivió en su primera temporada bajo la dirección de Genero Gattuso quien llegó a sustituir Carlo Ancelotti a media temporada 2019-2020.
“En ese año que llegó Gattuso fue muy complicado para mí porque no jugaba, no me estaban tomando en cuenta. Muchas veces lloré porque era una desesperación, pero trabajé mucho, seguí, pensando en querer jugar y gracias a Dios el siguiente torneo fue muy diferente”.
Tras ese momento el futbolista más caro en la historia de los Partenopei, entendió su lugar en la institución y con la confianza del nuevo técnico, Luciano Spalletti, cedió estelaridad para conseguir el tercer título de liga en la historia del Napoli.
“Estoy consciente de que me faltaron más goles y más asistencias, pero sé que hice trabajos diferentes, ayudé al equipo de diferentes formas porque así me lo pidieron, así lo traté de manejar para llegar al objetivo. Eso es lo principal, trabajar y estar disponible para el equipo. Ahora me tocó generar las jugadas, no ser el foco de atención, pero creo que hice un gran trabajo”.
Actualmente Chuky se recupera de una lesión y termina contrato en 2024, pero dejó en claro su intención de quedarse en Nápoles durante muchos años más, por todo lo que representa la ciudad, el equipo y el recíproco cariño a los fanáticos: “Lo que yo quisiera sería quedarme muchos años aquí, he hecho una historia aquí y sería muy bueno para mí, pero hay cosas que uno no puede controlar, que no están en nuestras manos. Ojalá que en este tiempo se pueda arreglar algo y que sea aquí”.